Una luz en el océano, de Damián Perea
Damián Perea, uno de los nombres más activos de la animación canaria, es el responsable de Una luz en el océano, un cortometraje realizado para la candidatura de Las Palmas 2016 a capital de la cultura europea que ha sido grabado con una cámara RedOne. El cortometraje podría describirse como un documental-futurista, muy influenciado por películas como AI (Inteligencia Artificial, 2001, S. Spielberg), y se ambienta en una hipotética ciudad de Las Palmas de Gran Canaria en el año 2066, donde los seres humanos conviven en equilibrio con robots y se ha alcanzado un equilibrio sostenible con el medio ambiente.
El cortometraje fue realizado en cuatro semanas, de las cuales tres se dedicaron exclusivamente a labores de postproducción.
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