Videovigilados
Mañana día 11 de octubre tiene lugar el I Día Mundial contra la Videovigilancia o televigilancia en multitud de ciudades de todo el globo . El movimiento, que posiblemente tenga un gran seguimiento y propagación en los próximos años, está llamado a confrontar una tendencia creciente e inquietante: la videovigilancia. El mundo de la animación no es ajeno a este problema, ya que casi todos los animadores se han digitalizado en la última década y no es extraño encontrar a gente que trabaja a distancia o con un entorno altamente digitalizado, donde es muy fácil el control absoluto sobre el trabajador de una forma anónima.
La propagación de la videovigilancia (ciudades como Londres tienen una inquietante red de videovigilancia, muy similar a la que describía George Orwell en su novela "1984") con fines nunca claros y bajo pretextos altamente dudosos (una encuesta realizada recientemente en diez ciudades de todo el mundo por Cesis destaca que el miedo es mayor entre los habitantes de ciudades más industrializadas y curiosamente con un porcentaje de inseguridad muy bajo, mientras que por el contrario, los habitantes de ciudades como São Paolo o El Cairo tienen una baja sensación de peligro).
El miedo en las sociedades y su aprovechamiento político y empresarial del mismo, el control de la identidad por medio de la tecnología y la progresiva quiebra en muchos derechos básicos que los gobiernos de países democráticos de todo el mundo han ido haciendo en la última década son temas candentes, de nuestro presente más inmediato y que han inquietado a multitud de animadores. Existen dos formas principales de afrontar este tema hasta el momento: desde el punto de vista narrativo, con una gran cantidad de argumentos a menudo ambientados en un futuro cada vez menos lejano y con el trasfondo de la novela de Orwell siempre presente; o desde el aspecto político y militante y por tanto, acusador e incómodo.
"Welcome to Glaringly" entraría dentro de la primera categoría. El enlace que ofrecemos aquí no hace justicia a la calidad original de imagen, pero tiene la ventaja de ofrecer el cortometraje al completo. (Aquí tienes otra web que ofrece sólo un fragmento pero de una calidad de imagen superior). Se trata de un proyecto de Channel Four realizado por Grant Orchard, que ilustra perfectamente los malos usos y las malinterpretaciones que pueden originar la "supervideovigilancia".
"Stop the Big Brother State" pertenece a la segunda clase de planteamientos. Realizado con un estilo muy elegante e inteligible, desmonta varias de las ideas argumentadas por todo tipo de instituciones que tratan de sustentar las supuestas ventajas de una mayor seguridad a cambio de la pérdida de cierta identidad privada. El cortometraje, realizado por el alemán David Schart, se ofrece en inglés. Por desgracia, no hay disponible ninguna versión subtitulada, pero merece la pena tan sólo verlo, por su elegante forma de resolver esste tema.
Ambos cortometrajes son proyectos realizados dentro del ámbito universitario, como proyectos de estudio.
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