Profesiones: Animador (2D, 3D)

Dentro de la categoría animador podríamos distinguir diferentes subcategorías.
Así pues, encontraríamos al animador de personajes, encargado de darle vida y personalidad a los personajes del proyecto; el animador de efectos especiales, que realiza todo lo que no sean personajes, es decir, agua, viento, fuego, relámpagos, explosiones, etc.; el artista gráfico, que a menudo proviene del ámbito del diseño gráfico en movimiento, y es el que se encarga de animar texto y formas; y el animador de stopmotion, que está especializado en crear y manejar figuras de plastilina, muñecos y marionetas.
La función principal del animador se asemejaría a la de un actor, en el sentido en que en vez de utilizar su cuerpo como forma de expresión, utilizaría los personajes para ello. Dependiendo de su habilidad como animador, será capaz de otorgarle una naturalidad, personalidad convincente y credibilidad a lo que anima; deberá atender a los deseos del director y de los tiempos marcados para producir el movimiento y la acción de forma acorde.
El animador nunca actúa solo, y siempre debe ser consciente del trabajo de los otros animadores y respetuoso con su interpretación, con los que forma un equipo, ya que necesita acompasar su forma de entender el personaje (y el guión) con el resto, para mantener la consistencia durante toda la producción.
Se ha dicho muy a menudo que los actores son gente tímida o actores frustrados, aunque esto se trata de un tópico muy viejo.
A diferencia de los animadores 2D, los animadores 3D deben tener muchos conocimientos de tipo técnico, para poder dominar bien el software con el que trabajan. Ambos deberían conocer en profundidad los principios de la animación, así como tener buenas nociones anatómicas y capacidad de observación.
Otra diferencia entre el animador 2D tradicional y los animadores digitales (tanto 2D como 3D) es que a estos últimos se les pide producir una escena entera ellos mismos, mientras que un animador 2D tradicional sólo creará las claves principales y como mucho, algunas otras claves secundarias, dejándole el resto del trabajo al asistente de animación y al intercalador.
En grandes producciones, tales como largometrajes o publicidad para TV, pueden llegar a buscarse animadores igual que si fueran actores, atendiendo a los tipos de interpretaciones que dominan.